jueves, 29 de abril de 2010

La primera canción que aprendí a la guitarra

Allí va la canción

No importa que hoy no haya salido el sol
me hace sentir que tu luz es más fuerte,
da igual que no utilices la razón
porque nunca te ha faltado suerte.


Escucha: sé que no debes pensar
porque he tardado tanto en conocerte
tu sabes que no se aprende a volar tan fácilmente
y que además el viento nunca miente...


ESTRIBILLO:


Y no volveré a pasar
delante de tu mirada,
puedes hacerme temblar y no quiero ver
tus ojos de hielo llorar...


Parece que los artistas no te van
parece que hay tipos con mucha más suerte
me invento mil formas de arreglar las cosas,
pero se me olvidó que somos dos...
que somos dos...


ESTRIBILLO
Y no volveré a pasar
delante de tu mirada (noo..)
puedes hacerme temblar
y no quiero ver tus ojos de hielo...

Esta canción cuenta la historia de amor que hubo en un tiempo y que, aunque perdura, se hace imposible. Él es capaz de sobrellevar  la vida en la cárcel gracias al recuerdo y permanencia de ese amor, al cual le pide entereza y perdón. Perdón por haber olvidado que eran dos.
Ella, que sólo la veremos en forma de flashbacks y fotografías, renunció a rehacer su vida por la persona que ama y que ahora está encarcelada.

Este video clip lo montaría con dos escenarios distintos. El primero sería el del mismo grupo tocando la canción. La localización sería en los Bufones de Llanes, en Asturias. Se trata de hacer un contrapunto de libertad con la segunda localización que sería una cárcel.



Los planos que se harían en Los Bufones de la banda tocando serían en movimiento y aéreos, alternándolos con planos más cortos.  En éstos, como ya he comentado antes, queremos transmitir todo el anhelo de libertad que siente el encarcelado por no poder estar con su amada. Estos planos tendrían una cromática muy clara.

Las imágenes de la cárcel serían del encarcelado recostado en la cama mirando una foto de los dos, en el patio de presos paseando con un fondo de presos jugando al baloncesto, mirando al sol por la ventana enrejada... alternándolos con flashbacks de la historia que los separó: él con un arma en la mano, cuando es detenido por la policía, en el veredicto del juicio con ella de fondo en la sala, despidiéndose de ella, enjuagándole las lágrimas (ojos de hielo). Estas planos serían muy grises. Los flashbacks se diferenciarían por su marco borroso.

martes, 27 de abril de 2010

Uno de mis videoclips favoritos...


Este vídeo, como otros tantos de Dj Earworm, me encanta porque transmiten algo que va mucho más allá de la genialidad. Mezclar veinticinco canciones, las veinticinco más sonadas, más sintonizadas, más bailadas y más pegadizas es todo un reto. Pero más allá del reto y del resultado, es de elogio el hecho de que esas canciones sean totalmente distintas. No comparten temática, ni ritmo base, ni público al que se dirigen. Es aquí donde Earworm nos demuestra que su genialidad no ha sido juntar canciones y video clips archiconocidos, sino juntar a grandes masas bajo un mismo título y hacerlo de una forma que muy pocas personas serían capaces. Un aplauso a un gran dj? No, a un gran compositor.

sábado, 24 de abril de 2010

Jake y Edward unos años después...

Edward: Hola Jake! (entrando, cierra la puerta)
Jacob: (acostado en el sofa, apaga la tele) Hola Edward
Edward: (se acerca y se sienta en un sillón)¿cómo te encuentras?
Jacob: Pues hombre, la verdad es que no estoy divinamente, pero ya se sabe lo de vivir para siempre no va conmigo.
Edward: Ya…Si no olieras tan mal, te pegaría un bocadito y solucionado! Jajajaj!
Jacob: Me hincas un diente y despídete de Bella… (haciendo broma)
Edward: ¿Cómo está Renesmé?
Jacob: Preocupada, pero bien.
Edward: ¿Está en casa?
Jacob: No había quedado con Alice para unas compras.
Edward: ahh, sí, Bella me ha dicho que se iban las tres.
Jacob: Deben de creer que no me he dado cuenta que están preparando algo para esta noche.
Edward: Reconozcamos que no se cumplen 80 años todos los días.
Jacob: Jajajaja!!! Cierto, si yo tuviera 211 como tú, estaría harto de tanta celebración.
Edward: No te creas, siempre es un buen motivo para una romántica velada con mi mujer!
Jacob:¡ Qué tío! Oye (más serio) ¿Qué tal tu madre?
Edward: Pues mira, estamos preocupados. Desde que Carlisle murió no levanta cabeza.
Jacob: (en tono pensativo y preocupado) Eso es una de las cosas que más me inquietan…
Edward: ¿Cómo?
Jacob: Sí, no sé qué pasará con Reni cuando me vaya…
Edward: Bueno, no es momento todavía para pensar en esto.
Jacob: Tío, ¡no soporto esa ingenuidad que a veces pretendes transmitir! Nunca lo he aguantado…
Edward: Es que no sé para que te atormentas pensando en situaciones que no han llegado.
Jacob: Ed, me muero. Lo sé y tú también lo sabes. Reni lo sabe, todos lo sabéis… a qué viene sino que estéis preparando de esta forma mi cumpleaños. El año pasado ni siquiera os acordasteis!
Edward: Tienes razón. Pero no te preocupes por Reni. Al fin y al cabo tiene mucho de vampiro.
Jacob: Ehhhh!! Fifty fifty!!! Jajajaj!!! Todavía no sé cómo pude imprimirme con una medio vampiro…
Edward: ¡Dímelo a mí!
Jacob: Oye ¿tenéis noticias Rosalie y Emmet?
Edward: No. Desde que consiguieron escapar de los Vulturi, han desaparecido. No sabemos nada. Ni siquiera ni si están bien. Pero mejor así.
Jacob: (afirmando) Cualquier pista puede interceptarse por Aro y el resto.
Edward: Sí, no sé, llevamos un tiempo pensando en viajar. Mamá necesita salir de aquí y le atormenta la idea de no volver a ver a Rose y Emmet.
Jacob: ¿Y qué se supone que planeáis?
Edward: Bella dice de visitar a nuestros contactos para preguntarles si les han visto.
Jacob: Demasiado evidente ¿cierto?
Edward: Sí, ya sabes que siempre quiere protegernos y le parece que la mejor idea es ir a lo seguro.
Jacob: ¿Y tú? No me lo digas, tú quieres ir a los Vulturi y forcejear… Edward, ¡de verdad quieres tan poquito a tu familia! ¡Tienes una hija!
Edward: Es que no soporto ver a mi madre así.
Jacob: Sopesa las consecuencias. Y si no te importa, vete.
Edward: ¡Menuda educación! Y eso a qué viene?
Jacob: Tus ojos empiezan a tener un color que no me gusta y estoy esperando a unos humanos sabrosísimos… jajajajaja
Edward: Mmmm, (incorporándose) pues si eso me espero aquí escondidito. Te dejo de verdad, que Bella me ha hecho unos encargos.
Jacob: Un vampiro calzonazos. Si se hiciera una peli sobre ti éste sería el título.
Edward: Recuerda que me queda una eternidad con ella, más vale que la tenga contenta si no quiero que se vuelva a plantear olvidarse mi…
Jacob:¡ A puntito estuve de ganarte la partida chupasangres!
Edward: Calla perro, que me las hiciste pasar…
Jacob: Aishhh, es que no aprendéis. Os pensáis que con ese aspecto de modelos blancuchos tenéis a las mujeres babeando.
Edward: Jajaj! Venga Jake, reconoce que nuestro sex apil dista mucho del vuestro.
Jacob: Sí, pero no tenéis mérito, con un “bocao” pasáis de ser un tipo del montón al rey de la fiesta… Bua! Así no vale.
Edward: Bueno,(mirando el reloj) se hace tarde ¿Te traigo una manta más?
Jacob: Recuerda, tú: sangre fría, yo: sangre caliente. Vete de aquí que empieza a oler mal.
Edward: sí, señor, para que luego digan que con quien mejor se está es con la familia.
Jacob: Adiós, cierra la puerta que no quiero que entren los gatos!
Edward: Adiós! (cerrando la puerta)

miércoles, 21 de abril de 2010

Mi personaje favorito de ficción



Edward Anthony Masen (
Personaje de Crepúsculo, Luna nueva, Eclipse, Amanecer, Sol de Medianoche)
Creador(es):
Stephenie Meyer
Interpretado por: Robert Pattinson


Información
Raza: Vampiro
Sexo: Masculino
Edad: 17 (biológica)108 (cronológica, Crepúsculo novela)
Peso: 68
kilos
Nacimiento: 20 de junio de 1901
Fallecimiento: verano de 1918 (como humano)
Especialidad: Leer la mente
Ocupación: Estudiante


Familia
Elizabeth Masen (madre), Edward Antohny Sr. (padre), Carlisle Cullen (padre adoptivo), Esme Cullen (madre adoptiva), Mary Alice Cullen (hermana adoptiva), Jasper Hale (hermano adoptivo), Emmett Cullen (hermano adoptivo), Rosalie Hale (hermana adoptiva)
Cónyuge: Bella Swan
Hijos: Renesmee Carlie Cullen

Nacionalidad: Estadounidense


Edward Cullen (Edward Anthony Masen) es un
personaje de la Saga Crepúsculo; una saga de novelas de la autora Stephenie Meyer, que consta de los libros Crepúsculo, Luna Nueva, Eclipse, Amanecer y el aún no publicado Midnight Sun (Sol de Medianoche)
Biografía
Edward Cullen es, junto a Isabella, uno de los personajes principales de la saga de novelas de
Stephenie Meyer sobre una familia de vampiros 'buenos', que ha alcanzado un éxito sin precedentes, especialmente entre el público adolescente. La historia de la saga gira principalmente en torno al amor de adolescentes entre Edward Cullen, un vampiro, y Bella Swan, una chica de 17 años, tímida y reservada, a la que conoce en el instituto.
Edward fue transformado en vampiro a la edad de 17 años por
Carlisle Cullen, patriarca de la familia de vampiros sobre los que giran las novelas, quien vivio sus primeros años con los Vulturis, la familia vampírica de la realeza, la cual tienen un conjunto de reglas y quien la desobedece paga con su existencia; de antes de eso no se sabe mucho sobre su vida humana. Según él mismo explica en 'Crepúsculo', primera parte de dicha saga, nace en Chicago el 20 de junio de 1901; su nombre completo original era Edward Anthony Masen. Con 17 años deseaba convertirse en soldado, sin embargo, la epidemia de gripe española trunca sus planes; El primero en morir por dicha enfermedad fue su padre, el cual se llamaba Edward; luego la madre de Edward (Elizabeth Masen), a punto de morir, pide a Carlisle, que salve a su hijo. Carlisle llega a sospechar, según relata a Bella Swan, que la mujer sabía que él era un vampiro y que podía salvar a su hijo convirtiéndolo.
Esto ocurrió en el
verano (boreal) de 1918, según el relato del propio Edward. Así pues, Carlisle transforma a Edward en vampiro y de esta forma se convierte en su primer hijo adoptivo. Al convertirse en vampiro, los sentidos de Edward se exacerban y desarrolla nuevas facultades, siendo capaz de leer la mente de quienes le rodean, un don extraño incluso entre los vampiros.
Algunos pocos años después, Carlisle se encuentra con Esme, una mujer que da a luz a un niño prematuramente muerto. Cuando Esme sufre tal impresión decide intentar suicidarse, arrojándose desde un acantilado pero no muere, sino queda en la morge agonizando con todos los huesos rotos; Carlisle al encontrala la salva convirtiéndola en vampira en el último momento. Se enamoran y poco después se casan. Edward, desde ese momento, considera a Esme su madre a todos los efectos.
Al principio Edward no soporta la dieta del doctor Cullen por lo que decide seguir su propio camino; así que diez años después de su conversión (por lo tanto, en
1928) Edward se separa de Carlisle para emprender una vida de nómada. Carlisle, en ningún momento intentó retener a Edward a su lado. Le dijo que hiciera lo que quisiese, con todo y eso, también le dijo que si algún día querría volver a su lado, él estaría encantado de recibirlo.
Edward agradece el ofrecimiento, pero no cede y se marcha. Edward prueba la sangre humana, asesinando a personas "malas y criminales" (según su criterio), que en su opinión estos matarían a otra persona si él no estuviese, así no se perdería una vida humana buena, y el mundo se libraría de un criminal.
Al pasar el tiempo Edward se harta de esta vida y decide que él no quería seguir siendo un monstruo (él lo describe como un "complejo de dios", decidiendo quien merece la sentencia de muerte). Vuelve con Carlisle, que lo recibe con los brazos abiertos y se adapta a la dieta de sangre animal.
En
1933, cuando están viviendo en Rochester, Nueva York, Carlisle encuentra a Rosalie Hale mal herida y a las puertas de la muerte por culpa de su prometido, y decide convertirla en vampiresa a pesar de que Edward se opone rotundamente.
Edward tiene muy buena relación con toda la familia, excepto con Rosalie, su primera hermana adoptiva. A Edward no le gusta la forma de ser de ella: superficial y vanidosa, siempre pendiente de ser alabada por su grandiosa belleza y solo pensando en si misma; nunca han sido muy cercanos porque Edward no le prestaba la menor atención y por eso mismo intentaba que se fijara en ella, pero sin obtener la respuesta que se esperaba. Carlisle deseaba que Edward sintiera por Rosalie lo que él siente por su esposa Esme, sin embargo no tuvo el menor éxito.
Después de casi 100 años, conoce a una chica llamada Isabella Swan (Bella), hija del jefe de policía local de Forks (Charlie). Al principio Edward trata de alejarse de ella para no cometer la locura de asesinarla por su sangre tan apetecible, al punto de que escapa a Alaska por una semana. Sin embargo se da cuenta que no puede permanecer lejos de ella, él tiene una gran necesidad de estar a su lado y protegerla; en realidad está enamorado de ella y no existía nada más importante para él que Bella.
Sabe que ese amor es peligroso, especialmente para Bella, pero ambos están dispuestos a seguirlo. Su amor es dulce y peligroso a la vez. Es el amor que todos querrían sentir antes de morir. Al lado de Bella, Edward se siente casi "humano". También es un chico voluble y misterioso, cosa que dificulta aún más su relación.
Bella había despertado en él un amor de una increíble intensidad, y Bella también sentía lo mismo por él. Su mundo giraba ahora alrededor de Edward, como el de este último alrededor del de ella. Bella está tan enamorada de Edward que está dispuesta a dejar toda su vida atrás, para convertirse en inmortal. Pero él empieza a sentir miedo ya que sabe que Bella corre peligro al estar con él, y tiene dos pruebas de esto: la primera, cuando el sádico vampiro rastreador llamado James (pareja de Victoria) intenta asesinarla, pero él logra evitar esta tragedia matando a James, aunque a Bella le queda una marca en forma de luna en su muñeca (esto sucede en Crepúsculo); y, luego, en el cumpleaños 18 de Bella, cuando Bella al abrir uno de sus regalos se corta con un pedazo de papel y Edward al ver la reación de su hermano adoptivo Jasper la empuja y cae sobre una mesa de cristal haciendose un corte en el brazo, el cual produce mas sangre y altera no solamente a Jasper sino casi a toda la familia (esto sucede en el segundo libro, Luna Nueva) Gracias a estas situaciones, decide que lo mejor para ella es que ya no estén juntos, y se despide diciéndole que ya no la ama, ya que sabía que esa sería la única forma en la que lo dejaría marchar. Todos los Cullen se marcharon de Forks con él.
Durante el periodo que estuvieron separados Edward buscaba a Victoria (pareja de James) que quería vengarlo matando a Bella (matando pareja por pareja, como dijo Laurent) Es muy astuta, por lo que logro despistarlo y mandarlo a Brasil mientras ella perseguía a Bella en Forks. Pasaron meses sin que él encontrará rastros de Victoria. Además de la tristeza de su separación con Bella, se sentía decepcionado por no poderla cuidar ni siquiera a distancia. Con el tiempo se sentía cada vez peor. Se sentía vacío, sin vida. Se fue a vivir solo, lejos de su familia, ya que sabía que ellos sufrirían al verlo en tal estado. Él mismo le explica a Bella lo que sintió de la siguiente manera: <>.
Después de todos esos meses empieza a hacer planes para volver a Forks... pero recibe una llamada de Rosalie (una de sus hermanas vampiresas), quien le cuenta que Alice ha tenido una visión en la que Bella se tira de un acantilado, y que no la había visto salir a la superficie, por lo que se sobreentiende que ha muerto. Para asegurarse de que es cierto lo que la había contado Rosalie, Edward decide llamar a casa de Bella preguntando por Charlie; a esta llamada contesta Jacob (amigo licántropo de Bella; en el cuarto libro se aclara que no es licántropo, sino metamorfo). Jacob le dice que Charlie está en el funeral, pero como Edward no pregunta de quien, Jacob no le dice que el funeral es de Harry, un viejo amigo de Charlie. Entonces Edward decide viajar a Volterra, Italia, para pedirle a la familia vampírica de la realeza, los Vulturis, que lo maten.
En realidad Bella no estaba muerta, ni se había tirado del acantilado para suicidarse, como creyeron los Cullen; se había tirado porque era una forma de entretenerse en La Push (el lugar donde vive Jacob, su mejor amigo, el cual le había devuelto un poco de vida después de la marcha de Edward, ya que ella se sentía igual que el vampiro a causa de la separación) y, además, porque había descubierto que, en situaciones de peligro, la voz de Edward le hablaba en su mente, y se le había ocurrido que esta era una buena manera de volver a escuchar su voz. Pero había una tormenta, y el mar estaba muy peligroso. Casi muere ahogada, pero es salvada por Jacob. Más tarde se descubre que Alice no pudo ver en su visión cómo Jacob salvaba a Bella porque este era un licántropo, y ella no podía ver a los licántropos en sus visiones. Ese mismo día, Harry Clearwater, íntimo amigo del padre de Bella, muere de un infarto.
En ese momento Alice entra a la casa y le dice a Bella que Edward va rumbo a Italia, ya que ha decidido suicidarse porque cree que ella a muerto. Cuando analizan el asunto, Alice se percata de que el que llamó por teléfono ha sido Edward haciéndose pasar por Carlisle, en un intento de confirmar las palabras de Rosalie.
Bella, contra los deseos de Jacob, parte rumbo a Italia junto a Alice, donde impide que Edward se exponga al sol (táctica que él ha ideado para que los Vulturis lo matasen, ya que eso es lo que harían si algún vampiro revelara su existencia a los humanos). Al principio Edward cree que está muerto, y que se había encontrado con Bella en el cielo; pero luego se percata de que sigue vivo. Luego de una charla un poco alterada con algunos miembros de la guardia (Jane, Demetri y Felix) y con los mismos Vulturis (Aro, Cayo y Marco, quienes quieren matar a Bella pero gracias a Alice quien le dice a Aro que tuvo una visión en donde ve a Bella convertida en uno de ellos en un futuro no muy lejano, la dejan ir con la condición que ellos irian a comprobar si eso era verdad en su debido momento, Bella y Edward vuelven a Forks junto con el resto de los Cullen (con quienes se juntan en el aeropuerto), donde un irritado y enojado Charlie los recibe, maldiciendo a Edward por tener el descaro de volver después de todo el daño infligido a su hija, y a su hija por aceptarlo de vuelta. Edward se queda con Bella esa noche, y se da cuenta que Bella cree que él va a partir luego de asegurarse de que esté a salvo, por lo que le explica todo lo que pasó desde su punto de vista para que entienda que aún la sigue amando, y que esa circunstancia no iba a cambiar.
Bella le pide que hagan una reunión con todos los Cullen, (al principio Edward se muestra reticente, pero luego, cuando Bella le dice que se va sola caminando hasta la mansión Cullen, accede a llevarla). Bella plantea en esa reunión sus deseos de convertirse en vampiro y, además, como argumento a su favor, la inminente llegada de los Vulturis para comprobar si seguía siendo humana. Todos los Cullen están a favor de que ella se una a su familia como inmortal, menos Rosalie (que dice que a ella le hubiera gustado que alguien hubiera dicho "no" en su momento por ella) y Edward (que dice que él quiere que forme parte de su familia, pero no de ese modo). Al final, contra los deseos de Edward, (que se puso como loco cuando Carlisle le dio el sí a Bella) Carlisle le promete a Bella que la transformará luego de la graduación, pero...
...al final Edward le promete que él mismo la transformará si, a cambio, accede a casarse con él primero. Bella promete que lo va a pensar y deja el asunto en suspenso.
En Eclipse, el tercer libro de la saga, surge un triángulo amoroso que tiene en su centro a Bella, por quien Edward y Jacob competirán. El amor que Bella siente hacia Edward es más intenso y profundo que el que siente por Jacob, para ella Edward es su amor verdadero, y sólo al final se da cuenta de que ella ama tanto a Jacob como a Edward, pero que a Jacob lo ama sólo lo suficiente para hacerle a ellos dos (y a ella misma) aún más daño. Además, ella sabe sin quién no puede vivir, porque ya había estado separada de él antes, y sabía que sin él no podría vivir, por lo que, finalmente, Bella decide permanecer junto a su amado vampiro Edward. Con él terminan de cerrar el trato que habían dejado inconcluso en Luna Nueva (según el cual Edward convirtiría a Bella sólo si ella se casara con él), pero ella pone otra condición: se casaría con él sólo si él hacía el amor con ella.
En su luna de miel en la Isla de Esme, (en Amanecer), hacen el amor, pero Bella queda con cardenales por todo el torso y los brazos (aunque ella asegura no haber sentido dolor alguno), por lo que él decide que no volverá a tener sexo con ella hasta que se hubiera convertido, y se enfoca en distraer a su esposa con todas las maravillas de la isla, haciendo que terminara el día tan exausta que quedara famélica y prácticamente muerta de sueño. Bella hace lo que puede por lograr que su esposo cambie de parecer, pero sólo lo logra cuando, poco más de una semana después, se despierta llorando por un sueño, y ella le pide casi sin palabras que volvieran a intentarlo. Él, deseándolo tanto como ella, se rinde y vuelven a hacer el amor. Esta vez, Edward no la lastima, ya que logra canalizar los excesos y enfocarlos en romper el cabecero de la cama de Esme en vez de lastimarla a ella. Edward le cuenta que durmió doce horas. Al levantarse de la cama ese día, pierde el equilibrio y su esposo tiene que evitar que se estampe contra el piso. Vuelven a hacer el amor una vez más esa tarde, luego de que los encargados de limpieza se fueran.
Bella se despierta por la noche luego de sufrir una pesadilla, y se percata de que Edward no está con ella. Encuentra en la cama una hoja de papel para ella, en donde Edward le deja dicho que se ha ido al continente de caza, y que volverá pronto. Tiene hambre, por lo que decide hacer pollo frito, pero al comerse unos cuantos bocados, se percata de que sabe horrible, y lo tira a la basura. Luego, abre las ventanas para dispersar el olor. Va a la sala donde esta la televisión, pone una película, y vuelve a quedarse dormida. Se despierta cuando Edward vuelve, pero debe salir corriendo al baño, ya que le entraron nauseas. Estas se le pasaron tan violentamente como habían venido, y las tomó como consecuencia del pollo frito que tan mal sabía. La tarde siguió bien, hasta que, mientras miraba la televisión con Edward, volvieron a entrarle nauseas. Entonces decide buscar algún analgésico para el estómago, pero mientras lo buscaba, encuentra una cajita de aspirinas para el dolor menstrual, y ata todos los cabos sueltos. Empieza a contar los días, y se percata de algo. Edward entra al baño, le pregunta que le pasa, y ella le comenta que tiene un retraso de cinco días. Él le da una demostración de cómo convertirse en estatua en el suelo del baño, mientras ella corre hacia el espejo y se mira en él. Repara sorprendida en que asoma un pequeño bulto de entre sus caderas, y luego siente una ligera patada, aunque eso fuera imposible con sólo cinco días de atraso, y sólo habiendo tenido sexo con un vampiro.
Suena el teléfono de Edward, pero este no lo contesta, por lo que Bella lo hace. Alice pregunta qué ha pasado, y ella le pide hablar con Carlisle, a quien le cuenta lo que ocurrió. Edward <> en cierto momento de esa conversación, y le pide el teléfono. Habla con Carlisle, y este último termina afirmando que está embarazada.
Luego, Edward consigue los pasajes de avión para viajar ese mismo día, y le promete a Bella que va a sacar a esa cosa de adentro suyo antes de que le haga daño, afirmación con la cual Bella se queda absolutamente sorprendida, ya que ella ama a su bebé. Y decide, por el bien de su hijo, llamar a Rosalie para pedirle ayuda y hacer de cuenta que está de acuerdo con él durante todo el viaje, para que no sospeche.
Gracias a la ayuda de Rosalie y Esme (las cuales acarrearon consigo la ayuda de Emmett y Carlisle), Bella sigue adelante con el embarazo, contra los deseos de Edward. El bebé la daña desde adentro, porque es más fuerte que ella, y crece lo de una o dos semanas en un día. En un momento, Bella se estaba muriendo de inanición, ya que el bebé rechazaba la comida humana, pero a Jacob se le ocurre la idea de que el bebé tenía más de vampiro que de humano, por lo que querría sangre. Por ello, le dan de beber sangre a Bella, y el experimento es todo un éxito; la sangre la ayuda a reponerse.
Edward sigue odiando al bebé por el daño que le inflige a su madre, hasta que un día logra escuchar sus pensamientos. Lo que escucha es: que le gusta el sonido de la voz de Bella, que es feliz, que le gusta el sonido de la voz de él, y que ama a su madre por encima de todo. Cuando escucha esto último, acepta automáticamente que el bebé no es malo, y empieza a verlo como lo que en realidad es: su hijo. Escucha también que el bebé tiene una vaga noción de lo que causa perjuicios a su madre, e intenta evitar esas acciones, pero no siempre lo logra. Entonces Edward decide que es momento de que el bebé nazca, porque ya está lo bastante desarrollado, y seguir esperando sólo minimizará las posibilidades de sobrevivir de Bella. Entonces decide pedirle a Carlisle que le haga la cesárea al mediodía del día siguiente. Pide el consentimiento de Jacob para hacer una excepción en el tratado y convertir a Bella, argumentando que él es el verdadero líder de la manada y esa debe ser su decisión, y él le da el permiso.
Pero Bella pide pararse un minuto para estirarse. El vaso de sangre se cae, manchado el sofa, y ella, en un movimiento inconsciente, se da vuelta para recogerlo... pero el bebé estaba tirando en otra dirección, y eso le hizo un daño interno increíble, el cual la hizo gritar de dolor, el cual fue ahogado por el torrente de sangre que vomitó luego. Y tuvieron que hacer un parto de emergencia.
El embarazo de Bella sólo duró un mes.
Luego de casi morir en el parto, Edward la convierte en vampiresa. El bebé resultó ser <> y fue llamada Renesmee Carlie Cullen Swan. Y Jacob imprima a la bebé; esto quiere decir que ella es su alma gemela, que ella pasa a ser lo más importante en el mundo para él, que ella es el centro del universo para él. Es la forma en que los licántropos encuentran a su verdadero amor. La bebé no tiene ponzoña, pero cuando es bebé le gusta mucho morder.
La niña crece muy rápido, y a los tres meses tuvo la apariencia de una niña grande de un año o una niña pequeña de dos. Esto les preocupaba a sus padres, ya que si seguía ese ritmo de crecimiento, la niña llegaría a ser anciana a los 15 años, y la idea no le gustaba ni pizca a ninguno.
Jacob, en un intento de que los Cullen no se fueran de Forks, intentó que Charlie supiera que Bella seguía viva, pero que había cambiado... por ello cambio de fase delante de Charlie, para que él pudiera sacar sus propias conclusiones a partir de ahí. Supo también sobre Renesmee, y, aunque se dio cuenta de que la bebé tenía los ojos de su madre, tuvo que aceptar la versión falsa de Edward para, según este último, "proteger a Bella y a Renesmee". En esta versión él dice que tiene un hermano, quien fue adoptado por otra familia cuando sus padres murieron, y que este hermano y su esposa son los verdaderos padres de Renesmee, pero que estos fallecieron, y ahora él debía hacerse cargo de su sobrina. Bella pudo soportar el estar con Charlie sin asesinarlo, todo un logro. Desde ese momento lo vio muy seguido.
Pero Irina, una de las integrantes del clan de Denali, vio a Renesmee y creyó que era una niña inmortal (un bebé o un niño pequeño humano que ha sido transformado en vampiro). Las hermanas del clan de Denali les tienen verdadero odio a estos niños porque su madre creó a uno de ellos, y esa acción le costó la vida, por lo que fue a contarles a los Vulturis, y estos tomaron cartas en el asunto.
Alice ve cuando los Vulturis toman la decisión de intervenir, aunque tiene el leve presentimiento de que estos sólo esperaban una excusa para atacar al clan Cullen, simplemente porque veían en ellos mucho poder (ya que este es el clan de mayor magnitud después del suyo). Alice abandona a los Cullen dejándoles sólo una nota de despedida, llevándose a Jasper con ella, y no sin antes decirle al resto de su familia que debía buscar a todos los vampiros amigos que tuvieran para armar una multitud de personas suficientemente extensa que pudiera atestiguar que la niña era una semi-vampiro, y no una niña inmortal.
Los Cullen logran reunir a 21 testigos, además de ellos mismos, lo que hacía a un total de 28 personas, si se contaba en la suma a Renesmee. Además, contaban con el concurso de los licántropos, ya que Renesmee era el objeto de la imprimación de Jacob, y este no la iba a dejar desprotegida.
El único varón integrante del clan de Denali, Eleazar, quien tiene el don de conocer los dones de los demás, le dice a Edward que Bella es un <> (lo que quiere decir que tiene el don de proteger), y lo que protege ese escudo es la mente. Desde ese momento, Bella empieza a <> con Kate (otro miembro del clan de Denali) para aprender a expandir el escudo.
Cuando los Vulturis llegan (con un gran grupo de testigos que, según dijo Edward, a Aro le gusta tener como público, para que estos divulguen la noticia de que se ha hecho justicia), se encuentran con las 28 personas esperándolos. Carlisle se adelanta para hablar con Aro, y le pide que los escuche. Luego, Aro le pide a Edward que deje que él vea sus pensamientos para ver de qué se trataba toda la situación. Bella siente tanto odio hacia sus adversarios, y tanto miedo por Edward, que logra expandir su escudo a voluntad, cubriendo a toda la gente que estaba de su parte con él, pero decide, muy a su pesar, sacar el escudo de Edward, ya que este debía mostrarle sus pensamientos a Aro si querían tener alguna posibilidad de conciliar la paz. Cuando Aro toca la mano de Edward, pasados unos minutos, entiende la historia completa, y pide conocer a Renesmee. Bella, completamente en contra de lo que quería, se aproxima a Aro con Renesmee en brazos, y deja atrás el escudo, para que su hija pudiera mostrarle sus pensamientos a Aro.
Luego de estas escenas, Cayo habla sobre la relación entre los licántropos y los Cullen, y dice que es una gran traición a los vampiros que tengan una alianza con estos, y que por ello no permitan que uno de su especie masacre a la manada (Irina quería destruir a la manada por matar a Laurent, en venganza, pero los Cullen no se lo permitieron. (A eso se refiere Cayo).
Primero dice que están con los Hijos de la Luna (hombres lobos que para continuar con la especie deben morder a otros humanos e infectarlos). Pero Edward le dice que ellos no son los Hijos de la Luna, que son metamorfos (personas que se transforman en cierto animal), y que la elección de la forma lupina es pura coincidencia.
Cayo, entonces, le pregunta a Irina si quiere levantar cargos contra los Cullen por haber preferido a los licántropos sobre ella, pero ella dice que no, porque los Cullen siguen siendo su familia. Entonces Cayo, con una señal de la mano, hace que sus soldados asesinen a Irina. Tanya y Kate (dos de las integrantes del clan de Denali, hermanas de Irina) se llenan de odio, e intentar lanzarse contra los Vulturis, pero entre todos los integrantes de las filas de los Cullen intentan detenerlas, y lo logran.
Entonces, los testigos de los Vulturis se percatan de que algo raro está sucediendo, y empiezan a desconfiar. Aro se excusa diciendo que Irina pagó por levantar cargos falsos contra los Cullen, aunque sus testigos no se serenan del todo, y algunos huyen de la escena. Mientras tanto, Bella perfecciona su escudo, introduciendo ahora a todos los miembros de sus filas.
Y entonces Aro vuelve al asunto de Renesmee y argumenta que el futuro de la niña es incierto, y que no saben si será un peligro para el secreto de la existencia de los vampiros. Contra eso, nadie (ni siquiera Edward ni Bella) puede rebatir, y los Vulturis se someten a votación. Mientras tanto, Jane intenta atacar con su don (producir dolor a quien quiera con sólo mirarlo) a Carlisle, pero no funciona, ya que el escudo de Bella estaba trabajando. Edward se percata de esto, y cuando su esposa le pregunta porque atacan desde ahora, él le contesta que es el procedimiento habitual; los Vulturis suelen incapacitar al oponente, antes siquiera de terminar la votación. Alec también intenta usar su don contra las filas de los Cullen (imponer a todos los que quiera una oscuridad absoluta, que priva a las personas de los sentidos), pero tampoco puede contra el escudo de Bella.
Los Vulturis dejan de deliberar. Marco dice que no le parece que la niña sea un peligro en el momento, y que siempre pueden controlar cómo va la cosa más tarde, por lo que vota en favor de que la niña siga viva; Cayo, en cambio, dice que la niña es un peligro, y que debe ser destruida junto con todos los que intenten protegerla. Cuando Aro iba a votar...
...Edward le pregunta a Aro si la vida de su hija estaba en tela de juicio por el desconocimiento de su futuro, y también le pregunta si se irían todos en paz y tan amigos como siempre si se supiera el futuro que tendría su hija, y que no habría peligro alguno. Cuando Aro dice que sí, que todos podrían irse en paz si hubiera alguna manera de saber que Renesmee no era perjudicial para el secreto, Edward llama en voz alta a Alice, bajo las miradas sorprendidas del resto de sus filas.
Alice entra al lugar seguida de Jasper y de tres personas más. Una de esas tres personas es Kachiri, una amiga del Amazonas de los Cullen, cuyas hermanas (Zafrina y Senna) estaban entre sus filas. Los otros dos eran una mujer llamada Huilen, y un chico que no aparentaba más de 17 años, llamado Nahuel.
Huilen cuenta la historia de la vida de Pire, su hermana, y de cómo ella estuvo en un amorío con un vampiro. Pire adoraba a su bebé, y le pidió a su hermana que se hiciera cargo de él. Cuando él se abrió paso desde su madre para nacer, matándola en el camino, Huilen quiso tomarlo en brazos, y este la mordió. El bebé tenía ponzoña, por lo que Huilen se convirtió en vampiro. Desde ese momento, tía y sobrino estuvieron juntos.
Aro le preguntó su edad a Nahuel, y él dijo que tenía 150 años aproximadamente, y le contó que había dejado de crecer cuando llegó a los siete años, más o menos.
Aro, en un último y pobre intento de buscar una excusa para acabar con sus oponentes, le preguntó a Bella si la bebé tenía ponzoña, pero esta dijo que no.
Entonces, Aro decide que deben dejar marchar a la niña, y dejan en paz a los Cullen. Más tarde, Edward comenta que lo que más les atemorizó a los Vulturis fue el increíblemente poderoso don de Bella, y que fue lo que más les intimidó.
Desde ese momento, Edward fue feliz con su esposa Bella y con su hija Renesmee. Y siempre se contentó al pensar en que había obtenido todo lo que había deseado, más cosas que nunca había imaginado tener...


Apariencia física
En la saga "Crepúsculo", Bella describe a Edward como un ser insoportablemente hermoso, a veces ella misma cree que un ser como él no puede existir. También dice que es un dios, que es tan perfecto y no entiende como puede fijarse en ella, cree que son una pareja dispareja. En varias ocasiones menciona la perfección de sus rasgos faciales (pómulos salientes, una fuerte mandíbula, nariz recta, labios redondeados) y físicos, y hasta llega a compararlo con Adonis de la mitología griega. Su piel es blanca como el mármol, casi tan fría como el hielo y brillante como diamantes a la luz del sol. El pelo, despeinado y de color cobrizo que él heredó, en su vida humana, de su madre biológica, al igual que sus ojos verdes cuando era humano. Los ojos, hipnóticos e irresistibles, toman color de acuerdo con la fuerza de su sed, adquiriendo un color oscuro como el ónix cuando está sediento, o un color tan claro y brillante como el topacio cuando no tiene sed. Igualmente, cuando su sed se acentúa aparecen oscuras ojeras debajo de sus ojos. Su cuerpo es esbelto, alto, de un 1'85 m aproximadamente, fuerte y musculoso, pero no tan musculoso como Emmett ni tan delgado como Jasper, que son sus hermanos vampiros adoptivos.


Películas
Después de realizar las dos películas: Twilight y New Moon, el actor volverá a protagonizar la tercera parte de la saga de Twilight: Eclipse, que será estrenada el 30 de junio de 2010 y por último la película de Amanecer, la cual ya está casi confirmada, y que estaría lista para el 2011, además se rumora que (Amanecer) estaría dividida en dos partes que se estrenarían en el 2011 y 2012 respectivamente.

lunes, 19 de abril de 2010

Una historieta...

Tomé el micrófono. Mi compañero me dió la mano y me empujó al escenario, saludando mientras oía las primeras notas de la melodía. Sudorosa, me aferré a su mano y con la otra intenté concentrarme en la letra. Las luces me descentraban, mis piernas tiritaban y el miedo a un abucheo era desencajante. Poco a poco, noté cómo el micrófono se iba, mis dedos no llegaban a sujetarlo y se cayó. Silencio. Tras unos segundos eternos, María, mi amiga de toda la vida, dijo: ¡Sara, ésta es la última vez que rompes el singstar!

Aquella ceiba

Busqué desesperadamente el paraguas en el bolso mientras salía de la Iglesia de San Francisco. Afuera estaba lloviendo. Desde la zanja podía observar las carreras de los transeúntes en busca de uno de los taxis que circulaban por el asfalto mojado. Un joven de piel chocolate hacía desesperados intentos de detener uno. Pero los taxis, apenas hacían el amago de frenar, le observaban y volvían a pisar el acelerador. El joven, empapado, persistía, pero sólo consiguió que le salpicaran los coches al pasar. El mendigo de la ceiba, cubierto con un plástico transparente, se incorporó para dirigirse hacia el joven. Mientras avanzaba, miraba hacia atrás, comprobando si los cartones sobre los que se sentaba continuaban en su árbol. Aquel árbol era el símbolo de la igualdad, no negaba su techo a nadie...
El mendigo siempre llegaba a la misma conclusión...Los taxis podían negar a los negros, pero ese árbol nunca negaría su techo a nadie.

sábado, 17 de abril de 2010